El mundo es una dualidad. Existe el día y la
noche, el calor y el frío, el blanco y el negro; el hombre y la mujer. Aunque
existe el concepto de “bueno” y “malo”, la dualidad no habla de que uno sea
mejor que el otro. Habla de dos caras de una misma situación, distintas
en una situación igual.
-¿Y qué tiene que ver eso conmigo
Susana?-tal vez te estés preguntando, déjame te cuento la historia a
partir de la cual surge esto:
El día
de hoy me he encontrado con un buen amigo mío y su esposa. Teníamos más de un
año sin vernos por nuestras respectivas agendas y al encontrarnos en un evento,
pude ver fácilmente la cantidad de estrés a las que están sometidos ambos.
-La empresa crece sí- me comentó mi amigo con gesto cansado-
pero el precio
es demasiado alto. Claro que tenemos logros y pero mientras las ventas van
excelentemente bien surge un problema con el personal y viceversa.
-Es absolutamente agotador-me expresó su esposa- ¿No puede todo estar TODO
PERFECTO y BIEN?
La respuesta ideal sería que
sí, la respuesta honesta es ¡claro que no! La perfección no existe.
No estoy diciendo que si decides emprender, no encontraras hermosos momentos de
estabilidaddonde todo irá de maravilla. Los habrá pero es posible que duren
poco. Esto tampoco significa que de pronto vas a perder todo lo que tienes
porque le va a caer un meteorito a tu empresa o que Godzilla interrumpirá con
su característico grito para aplastarte de pronto.
¡No exageremos yéndonos a los extremos!
Lo que trato de decirte es que el camino de emprender tendrá,
como muchas cosas en la vida, dos
interesantes lados de la moneda. Y te conviene, créeme que te conviene, sortear esa dualidad
que a veces parece difícil o complicada.
E
incluso es a veces ¡una completa locura!
Esto quiere decir, como mi amigo y su esposa decían, que a veces
te va a ir genial en ventas pero vas a tener un reto (reto más que problema) que resolver con tu
personal. O habrás conformado un equipo genial de trabajo y entonces entrará en
vigor una nueva ley que te cambié la jugada. El
mercado cambia, el cliente usa una
nueva moda para comunicarse y mientras un lado grita “Rojo” con todas sus
fuerzas el otro grita que el “Azul” es lo único que importa.
La dualidad trae en ocasiones el asunto de la polaridad. La
polaridad sí hace referencia a lo opuesto. Hay ocasiones en que un mismo producto, por ejemplo, le encanta a un sector del
mercado y otro sector lo odia. Habrá ocasiones en que una persona te aplaudirá de pie una
misma frase y otra te abucheará con toda la capacidad de su voz. Una empresa
con un mismo servicio verá sus pagos detenidos en una ciudad ante el asomo de
una crisis, una crisis que no se ve por ningún lado en otra ciudad, en el
mismo país, ofreciendo la misma empresa el mismo servicio o producto ¡a veces
incluso en la misma ciudad!
¿Suena retador verdad? Realmente lo es.
Comprender esa dualidad
y polaridad nos sirve como
empresarios y emprendedores para no dejarnos comer por una situación por más
negativa o positiva que se presente. ¿Positiva también Susana? Preguntarás, sí
querido emprendedor, porque cuando todo va increíblemente bien es momento deahorrar
e invertir para cuando llegue el
invierno, que llegará. Y cuando llegue esa época de vacas flacas podrás no solo
resguardarte y comer… ¡Podrás aprovecharla y apoyar!
Debes
pensar que estoy loca, pero déjame que te explique bien:
En una de las crisis más fuertes que me ha tocado presenciar,
una de mis amigas empresarias comentó en una reunión que iba a vender un par de bienes raíces para apoyarse. Otra de mis amigas empresarias, una excelente líder con años de vasta
experiencia la detuvo y dijo:
–No es momento de vender
Señoritas, es momento de comprar e invertir. Usa tu buen crédito en el banco y resuélvelo, invierte y verás
duplicado su valor unos meses después.
Creo que fue la primera vez que escuché el concepto de “deuda
buena”.
Y por supuesto, nadie le hizo caso; ella sí siguió su propio consejo. Meses
después, tal como había pronosticado, sus variadas inversiones se
multiplicaron.
¡Su
sonrisa fue incomparable!
Igualmente en otra época de mucha abundancia, vi a un buen amigo ahorrar cada peso hasta que lo tildaron de “ávaro”. El simplemente se carcajeo de
todos esos comentarios y siguió ahorrando. Con ese ahorro movió su producto a
otra ciudad; todo el mundo le preguntó “¿Por
qué te tomas la molestia si aquí te va fantástico?” y él contestó “Sí
y ojalá así sea siempre pero por si acaso, voy a ampliar mi mercado”. Poco a poco, incluso creo nuevos productos ¡que le requirieron
una inversión enorme de investigación! Todo el mundo le dijo que estaba loco
pero un par de meses después cuando la abundancia en la región se fue, él no
tuvo nada de qué preocuparse.
Y así
tengo montones de ejemplos.
En mi propia vida, cuando experimenté un muy breve periodo de abundancia con mi primera empresa, me deje llevar por la euforia de lo
positivo y no ahorre nada. Ni siquiera compré algo valioso o útil. Cuando mis
malos manejos en finanzas y muchas otras cosas más hicieron vivir las
consecuencias, no tuve nada con lo que respaldarme. Y aunque ha sido un momento
terrible y difícil
en mi vida por un aspecto también
se volvió una época
de creatividad y aprendizaje incomparable.
Y ahora soy frugal y tengo
finanzas bien divididas, pero te hablaré de eso en otro artículo.
A veces, en un día muy atareado, las tareas que enfrentas como
emprendedor y empresario son increíblemente diversas. Puede ser que en la
mañana te toque ir a una entrevista, a una reunión súper elegante y en la tarde,
aunque tengas una persona encargada, te toqué lavar las tazas de dos
colaboradores. O puede ser que veas una mancha en el suelo y tomes una escoba y
decidas encargarte tú mismo. A mí me da risa cuando después de ir a un evento
genial, alguna persona me llama y me dice “¡Hey! ¿en dónde andas?” esperando
que le contesté que estoy en otro evento aún más fantástico cuando la realidad
es que sí, estuve pero en ese momento estoy en mi oficina resolviendo un
problema de un pago pendiente, un diseño debatido, etc.
Finalmente, quiero
decirte que seas o no empresario o emprendedor te conviene estar al tanto de la
dualidad y la polaridad de la vida. Vívela, aprende y disfruta. Mucho de este juego se trata de que lo positivo y lo negativo va
a encaminado a que te vuelvas la mejor versión de ti mismo, cada día.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario